Siete autores. Siete relatos. Siete crímenes perfectos.
SANGRE FRÍA (Jane Casey): Un cadáver aparece desnudo enterrado en la nieve, todo apunta a un suicidio o a un accidente por unas copas de más. Pero Valerie Wade sospecha que alguien planeó todo para que pareciese cualquier cosa menos un asesinato.
MUERTE EN FAMILIA (Hallie Ephron): La muerte de Flint Meade, propietario de la mayor empresa de videojuegos de EEUU, a manos de su hijo Bradley no despierta ninguna duda en la policía. Pero la psicóloga contratada para declarar un transtorno mental en el asesino intuye que la familia esconde información capaz de salvar a Bradley de la cárcel, el manicomio o una mezcla de ambos.
LA MUERTE ROJA (Brian Freeman): Tres mujeres pelirrojas aparecen brutalmente asesinadas con varias cuchilladas por todo el cuerpo. Alison Malville cree que el asesino es su marido, una sospecha que la está enloqueciendo.
PALABRAS PARA UNA MUERTA (Nicci French): En una reunión para recordar a Lisa, muerta al caer por un acantilado, sus seres queridos hablan de ella en público. Uno de ellos, sin darse cuenta, habla demás.
POST MÓRTEM (Karine Giébel): Un admirador muerto regala a la célebre actriz Morgane Agostini una mansión de Ardéche. Un regalo que encierra la muerte en sus puertas.
GOODBYE, INC (Chris Mooney): Bobby, un joven enfermo de obesidad, descubre un méodo desconocido que parece funcionar, sin embargo, puede que no todo sea tan fácil.
LA PAREJA PERFECTA (Esther Verhoef): la relación entre un cirujano plástico obsesionado en crear la mujer perfecta físicamente y una paciente incapaz de aceptarse a sí misma puede acabar muy mal.
OPINIÓN: El libro, generalmente, está bien, pero hay historias bastante mejores que otras. "La muerte roja" y "Post mórtem" fueron mis historias preferidas, ambas son crímenes perfectos. Otras, como "La pareja perfecta" o "Goodbye, Inc" no se centran en ese tema.
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